Dos poetas, Schiller y Shelley, a mutua distancia de treinta años, albergan y retratan el sentimiento humanitario de aquellos días ardientes. Los dos descontentos, nebulosos y oratorios. Intrépidos heraldos, videntes irritados, bajo el cielo tormentoso y enigmático sostienen y vibran en la diestra un haz de rayos.
p. 41
En un texto sobre el movimiento literario y filosófico que da lugar al romanticismo (Sturm Und Drang) el poeta dedica la mayor parte a hablar del estremecimiento de los hechos históricos y la naturaleza de los países (Inglaterra, Francia y Alemania). Su ponderación del lugar de los poetas puede leerse como un modelo de lo que él mismo asume para su momento.
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